martes, 24 de marzo de 2015

ARTE MEXICANO (escuela mexicana de arte)


Muralismo
El Muralismo fue movimiento artístico de carácter indigenista, que surge tras la Revolución Mexicana de 1910 de acuerdo con un programa destinado a socializar el arte, y que rechaza la pintura tradicional de caballete, así como cualquier otra obra procedente de los círculos intelectuales. Propone la producción de obras monumentales para el pueblo en las que se retrata la realidad mexicana, las luchas sociales y otros aspectos de su historia. El muralismo mexicano fue uno de los fenómenos más decisivos de la plástica contemporánea iberoamericana y sus principales protagonistas fueron Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros. A partir de 1930 el movimiento se internacionalizó y se extendió a otros países de América.

El impulsor de este movimiento fue José Vasconcelos, filósofo y primer secretario de Educación Pública de México quien, tras la Revolución, pidió a un grupo de artistas jóvenes revolucionarios que plasmaran en los muros de la Escuela Nacional Preparatoria de la ciudad de México la imagen de la voluntad nacional. Los artistas tenían total libertad para elegir los temas y mostrar un mundo nuevo sobre las ruinas, la enfermedad y la crisis política surgida tras la Revolución. Influenciados por el rico pasado precolombino y colonial, los muralistas desarrollaron un arte monumental y público, de inspiración tradicional y popular, que ponía fin al academicismo reinante, exaltando su cultura y origen precortesiano.


La pintura mural fue declarada el arte oficial de la Revolución. El manifiesto en el que se hacen públicos los principios del movimiento, Manifiesto del Sindicato de Pintores y Escultores, fue dedicado a “la raza indígena, humillada durante siglos, a los soldados que lucharon en pro de las reivindicaciones populares; a los obreros y los campesinos, y los intelectuales no pertenecientes a la burguesía” y parte de nuevas ideas y conceptos: “repudiamos la pintura llamada de caballete y todo arte de cenáculo ultraintelectual por aristocrático, y exaltamos las manifestaciones de arte monumental por ser de utilidad pública. Proclamamos que toda manifestación estética ajena o contraria al sentimiento popular es burguesa y debe desaparecer porque contribuye a pervertir el gusto de nuestra raza, ya casi completamente pervertida en las ciudades. Proclamamos que los creadores de belleza deben esforzarse porque su labor presente un aspecto claro de propaganda ideológica en bien del pueblo, haciendo del arte una finalidad de belleza para todos, de educación y combate”. Reivindican el arte indígena como arte en sí mismo y como modelo social, “el arte del pueblo de México es la manifestación espiritual más grande y más sana del mundo y su tradición indígena es la mejor de todas”.


El muralismo se desarrolló e integró fundamentalmente en los edificios públicos y en la arquitectura virreinal. Los muralistas se convirtieron en cronistas de la historia mexicana y del sentimiento nacionalista, desde la antigüedad hasta el momento actual. La figura humana y el color se convierten en los verdaderos protagonistas de la pintura. En cuanto a la técnica, redescubrieron el empleo del fresco y de la encáustica, y utilizaron nuevos materiales y procedimientos que aseguraban larga vida a las obras realizadas en el exterior. El introductor de nuevas técnicas y materiales fue Siqueiros, que empleó como pigmento pintura de automóviles (piroxilina) y cemento coloreado con pistola de aire; Rivera, Orozco y Juan O’Gorman emplearon también mosaicos en losas precoladas, mientras que Pablo O’Higgins utilizó losetas quemadas a temperaturas muy altas. Las investigaciones técnicas llevaron también al empleo de bastidores de acero revestidos de alambre y metal desplegado, capaces de sostener varias capas de cemento, cal y arena o polvo de mármol, de unos tres centímetros de espesor.

Desde 1922 hasta nuestros días no se han dejado de hacer murales en México, lo que prueba el éxito y la fuerza del movimiento. En la década de 1930, la internacionalización del muralismo se extendió a Argentina, Perú y Brasil, y fue adoptado incluso por Estados Unidos en algunos de sus edificios públicos.

El hombre de Fuego
José Clemente orozco
La Trinchera José Clemente orozco
Mural en la torre de Rectoria de la UNAM
David Alfaro Siquieros

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 Arquitectura Mexicana del Siglo XX

La arquitectura moderna en México tiene una desarrollo importante en la plastisidad de la forma y el espacio, José Villagrán García desarrolla una teoría de la forma que marca la pauta de enseñanza en muchas escuelas de arquitectura del país dentro del funcionalismo. El surgimiento de la nueva Arquitectura Mexicana nace como orden formal de las políticas de un estado nacionalista que buscaba la modernidad y la diferenciación de otras naciones. Juan O'Gorman fue uno de los primeros arquitectos ambientalistas en México, desarrollando él la teoría "orgánica", tratando de integrar al edificio con el paisaje dentro de los mismos planteamientos de Frank Lloyd Wright.  En la búsqueda de una arquitectura nueva que no semejara a los estilos del pasado logra una manifestación conjunta con la pintura mural y el paisajismo.

En 1941 adquirió la ciudadanía mexicana Felix Candela, en Acapulco comenzó su verdadera carrera como arquitecto con el diseño de algunas casas y hoteles. En 1950 fundó con los también arquitectos hermanos Fernando Fernández Rangel y Raúl Fernández Rangel la empresa constructora Cubiertas Ala. En 1953 recibió una cátedra en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). También ese año salen de la empresa los hermanos Fernández Range, quedando sólo su hermano Antonio. La empresa perdurará hasta 1976, aunque Félix la deja en manos de su hermano en 1969. Durante los 20 años que duró, se elaboraron 1439 proyectos de los que se realizaron 896. La mayoría fueron de tipo industrial, como la estructura en forma de paraguas cuadrado de cemento con el caño de agua de lluvia en la columna central, que proliferan por aparcamientos, gasolineras y, en general, cualquier espacio que requiera de una cubierta ligera, barata, resistente y que ocupe poco espacio en el suelo. Variantes de estas estructuras (paraboloide hiperbólico), se utilizaron en iglesias, donde proporcionan un gran espacio despejado para el culto. El punto culminante de la empresa es la edificación del Palacio de los Deportes para la Olimpiada de México 1968.
La Escuela de Jalisco fue una propuesta de esos movimientos socio-políticos que demandaba el país, Luis Barragán logró conjuntar la forma del espacio con formas de la arquitectura rural vernácula de México y países del Mediterráneo (España-Marruecos), integrando un colorido impresionante que maneja la luz y la sombra en distintas tonalidades abriendo una mirada al minimalismo internacional. Otros exponentes destacados de la Escuela de Jalisco se encientra Fernando González Cortázar con una mayor estilización de las formas en concreto y materiales que recuerdan la arquitectura vernácula.
La arquitectura mexicana es un fenómeno cultural que nace de la ideología de gobiernos nacionalistas del siglo XX la cual fue dando forma a la imagen de identidad por su colorido y abigarramiento de elementos ornamentales heredados de culturas ancestrales, de formas clásicas, monumentales; y posteriormente la incorporación del modernismo y las tendencias vanguardistas de corte internacional. Dentro de la arquitectura del estado por la fuerte insidencia del presidencialismo mexicano, sobresalen arquitectos como Teodoro González de León, Agustín Hernández Navarro, Abraham Zabludovsky Kraveski, Mario Pani entre otros.

Papalote Museo del Niño
 
Hotel camino real
Televisa Santa Fe



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Bibliografía

  • "Muralismo." Microsoft® Encarta® 2009 [DVD]. Microsoft Corporation, 2008. 
  • Microsoft ® Encarta ® 2009. © 1993-2008 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos.Aguilar-Moreno, Miguel y Cabrera, Erika (2011). Greenwood Biographies, ed. Diego Rivera: A Biography (en inglés). ABC Clio. ISBN 978-0-313-35406-9.
  • Moyssén, Xavier. “El Retrato de Detroit” por Diego Rivera. Anales del Instituto de Investigaciones Estéticas. Volume XXIII-47, 1977. pp. 45-58. Burns, E. Bradford y Charlip, Julie A. (1994)
  • Latin America: A Concise Interpretive History (en inglés). Prentice hall.CNN México (6 de julio de 2012). «José María Velasco 'retrata' al Popocatépetl en el 'doodle' de Google» (en español). Consultado el 6 de julio de 2012
  •  Gonzalez, Alicia María, Murals, fine, popular or folk art? Aztlán: a Journal of Chicano studies. Volume 13 No. 1-2. pp. 149-163. 
  • López Austin y López Luján, 2001: 202; Cobean y Gamboa Cabezas, 2007: 37.
  • En referencia al área centro de México, donde paralelamente al desarrollo de Chichén Itzá florecía la Cultura tolteca en Tollan-Xicocotitlan. Entre estos autores hay que citar a Michael D. Coe (1996). Sin embargo, hay opiniones divergentes bajo el argumento de que en aquellos años todavía no se construía siquiera la ciudad de México-Tenochtitlan.  
  • López Austin y López Luján, 1996. 

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